El sábado 1º de febrero, miles de personas se concentraron en la Plaza del Congreso para participar de la Marcha Federal LGBTQIA+, que reunió a gremios, organizaciones políticas, colectivos de jubilados y una gran diversidad de espacios sociales. La movilización, que culminó en la Plaza de Mayo, se realizó en repudio a las manifestaciones públicas del presidente Javier Milei contra la diversidad sexual y la denominada "ideología de género".

En este contexto, Velocidad Argentina dialogó con el consultor político Pablo Romá para analizar el impacto de la marcha, la reacción del gobierno y el panorama de los partidos de cara a las próximas elecciones legislativas.

Romá definió la marcha como “multitudinaria y nacional” y destacó que “al principio no estaba tan claro cuál podía ser el volumen de la convocatoria, pero terminó siendo muy grande”. Para el analista, "la movilización expresó un límite frente a los agravios, un límite frente a las agresiones y al discurso violento que tiene el presidente muchas veces para dirigirse a sectores de la sociedad, en este caso a la comunidad LGBT+”.

El consultor subrayó que “el gobierno trata de minimizar lo que no le gusta, trata de generar la idea de que no existe, pero ha sido una movilización muy importante y significativa”. Además, señaló que “la movilización del sábado era muy necesaria y al mismo tiempo marca la potencia que tiene ese sector, que hoy se siente agraviado no solo por la batalla cultural, sino también por cuestiones económicas”.

En este sentido, Romá consideró que “lo que expresó la movilización del sábado es que la agenda anti-woke no es la agenda de la Argentina”.

Consultado sobre la reacción oficial, el especialista advirtió que “el riesgo más grande que tiene el gobierno es embalarse en discusiones que no son propias de la realidad del contexto argentino”. 

Respecto de la situación del peronismo, Romá sostuvo que “está en una discusión: si tiene que ser Axel Kicillof, si Cristina Fernández de Kirchner tiene que jugar o no, porque gran parte de los problemas vienen de ahí”. Para superar las tensiones internas, consideró que “más que buscar diferencias, hay que tratar de generar condiciones de vínculo entre lo ideológico y lo económico”.

Elecciones legislativas 2025

De cara a las próximas elecciones, Romá señaló que “el gobierno tiene mucha expectativa de que le vaya bien; esa expectativa se sustenta en que gran parte de la base electoral del PRO hoy está con el gobierno”. Además, subrayó que “muchos dirigentes están dando el paso del PRO a La Libertad Avanza”.

“La clave va a estar en los sectores moderados”.

Según su análisis, “la clave va a estar en los sectores moderados: si entienden que esta esperanza, tensionada por un sacrificio, puede dar lugar a ese momento de prosperidad que el presidente viene prometiendo”.

“La provincia de Buenos Aires va a ser central, el objetivo que tiene el gobierno de liquidar al kirchnerismo se juega en la provincia”, acentuó el entrevistado en diálogo con Mayra Garcia y Gonzalo del Monte. En cuanto al peronismo, consideró que “la base electoral demanda unidad, no mayor nivel de fragmentación”.

Pablo Romá: "Hay cuestiones que el Presidente tiene que revisar, no puede atacar a ciertos sectores"